Espiritualidad Humana* La Sofía Serie <http://www.eelea.com/sophiaseries.html>- Año 3 <http://www.eelea.com/sophiaseries/year-3.html> Domingo, 06, de setiembre 2009 www.es.eelea.com Traducido por Maribel González – marigo28@gmail.com * * *Y así comenzamos juntos. * A medida que yo, *Sofía*, entro en tu espacio para estar contigo, para pasar algún tiempo contigo, para ver contigo todo lo que está cambiando dentro de tu vida ahora mismo. Para mirar atrás a todo lo que ya ha cambiado y mirar hacia delante a lo que va a cambiar. Es un placer para mí estar contigo. Y antes de empezar quiero pasar algún tiempo únicamente estando contigo, únicamente estando en tu presencia. Quiero dejar que mi respiración fluya, enfocar mi conciencia en ti y disfrutar este momento del ahora. Aprovecho esta ocasión para sentir mi orgullo en ti; el orgullo que llevo dentro, orgullo en ti y tu sendero. Para sentir mi gozo por todo lo que está desarrollándose y aflorando en la tierra ahora mismo. Para sentir mi gozo de que tú estás aquí, para sentir mi gozo por tu valentía, esta fuerza interior profunda que vive dentro de ti, y tu apertura que te permite dar un paso más una y otra vez – no aferrándote a lo que ayer parecía ser correcto, sino que continúas caminando a lo Nuevo, a lo desconocido sin temor -. Yo, *Sofía*, te invito a estar totalmente aquí, dentro de este momento del ahora, e invito especialmente a tu sí mismo humano a estar aquí. Te quiero invitar a experimentar nuestra reunión hoy de una manera nueva. Mira: hasta ahora te has abierto para tu sensación, tu ser interior, el aspecto espiritual dentro de ti durante nuestro tiempo compartido. Y tu sí mismo humano ha retrocedido un poco. Y en realidad tú sí mismo humano no ha entendido lo que estabas haciendo. Tú sí mismo humano se ha ido a dormir – hablando metafóricamente – mientras te abrías para algo más, para otro aspecto de ti mismo. Yo, *Sofía*, quiero invitarte hoy en primer lugar a entrar en este espacio *con tu sí mismo humano y tus sentidos humanos*. Hoy tu sí mismo humano está justo al frente. Hoy estás invitado a permitir que tu sí mismo humano sienta y perciba, experimente nuestro tiempo compartido. El sí mismo humano no debería ser dejado fuera hoy. De hecho, tiene la silla de honor. Puede estar aquí entre nosotros y experimentar todo lo que compartimos juntos. Y quizás eso sea un reto para tu sí mismo humano. Y quizás en realidad tú no hayas permitido que tu sí mismo humano llegue a conocerte todavía. Y quizás tu sí mismo humano todavía está convencido de que tú eres alguien más. Alguien mucho más pequeño y no tan especial. Alguien que no siente mucho. Alguien que no cree mucho o intente cualquier cosa Nueva. Quizás en tu etapa inicial del despertar – cuando sentiste que había más, más de ti mismo a explorar – quizás puedas dejar de lado este aspecto de ti mismo porque pensaste que tenías que elegir. Porque estabas seguro de que este nuevo sí mismo brillante y chispeante del que te acababas de dar cuenta no quería tener nada que ver con tu sí mismo viejo, con la persona que has sido. Entonces dejaste de lado este aspecto entero de ti mismo. Dejaste de lado tus amistades. Dejaste de lado tu familia, tu trabajo, tu hogar, tu imagen de ti mismo, tu identidad. Dejaste de lado todo lo que has sido hasta ahora. Y tu sí mismo humano en ese momento sólo fue una figura menor en tu vida. En realidad no tan importante. Quizás hasta una carga a veces el ocuparte de tus necesidades humanas. Algo más sucedió cuando te separaste de tu sí mismo humano. Quizás hayas notado cuantos maestros espirituales a veces parecen perder el contacto con la realidad; a veces parecen aburridos y serios, disciplinados y arrogantes. Quizás también hayas notado lo distante que está el mundo espiritual de tu sí mismo humano, de tu ser humano. Entonces cuando se deja atrás tu sí mismo humano también te eliminas un poco más de tu vida humana. A mí, *Sofía*, me gustaría invitarte hoy a sentir este impulso interior; este impulso interior que tú permitiste que siguiera adelante, que tú permitiste para elegir algo Nuevo para ti mismo – pero que también te llevó a dejar atrás una parte de tu vitalidad, tu pasión, tu compasión, el ser humano. Entonces tú también has perdido un poco el contacto con la realidad; eres un poco distante, un poco aburrido, un poco arrogante. Pero no hay nada malo con eso. Entonces a mí, *Sofía*, me gustaría invitarte hoy a tener en cuenta si quieres dejar que este ser colorido, imperfecto, compasivo y fuerte que realmente eres, tu sí mismo humano, regrese a tu vida. De cierto modo te impedirá agudizarte demasiado al extremo. Tu sí mismo humano siempre te traerá de regreso abajo a la tierra. Tu sí mismo humano ayudará a asegurar que no te vuelvas demasiado distante y arrogante pero en lugar de ello que estés más presente y seas más compasivo contigo mismo y otros. ¿Puedes empezar a apreciar a tu sí mismo humano de nuevo, para desarrollar este orgullo, este amor por ti mismo de nuevo? Para notar que este cuerpo, este sí mismo humano con todas sus necesidades no es tu enemigo. No es algo a lo que tengas que renunciar. No es algo indeseable que te retiene – quizás hasta sea algo que te vaya a ayudar a equilibrarte más-. *** Tu sí mismo humano también tiene una sabiduría profunda; una sabiduría muy básica y simple aunque no menos valiosa. Tu sí mismo humano siempre trae a tu consideración cuando te dañas, cuando te juzgas severamente, cuando ignoras tus necesidades o te obligas a prescindir de algo. Tu sí mismo humano obtendrá tu atención estando triste, sollozando, diciéndote: mira, me estás causando dolor, duele. El sí mismo humano te ayudará a tratarte a ti mismo de una manera diferente y más amorosa. Mira: tu *sí mismo espiritual* no está conectado a la tierra y a menudo no tiene el sentido para estas cosas. En grado sumo, tu sí mismo espiritual únicamente se esfuerza por el cambio, por la siguiente apreciación, por el siguiente paso, por el siguiente taller o seminario, por el siguiente libro, el siguiente sanador o gurú. Y se le olvida de que únicamente estamos aquí en la tierra para pasar volando tan rápido como sea posible por todas nuestras experiencias. Pero estamos aquí para sentir, para sentir cada experiencia en su profundidad; para descubrir el gozo en cada parte de nuestro sendero. Para experimentar la vida en su profundidad en lugar de sólo deslizar rápidamente la superficie. Entonces yo, *Sofía*, te pregunto ahora: ¿crees que es posible invitar a tu sí mismo humano, invitarlo a volver de donde lo dejaste hace algunos años o algunas décadas? A abrir tu puerta. A sonreírle a tu sí mismo humano y ver una vez más la belleza dentro de ti. No la perfección, no la ambición, no el papel artificial que querías representar sino verte a ti mismo un poco más como realmente eres. ¿Puedes permitir que todo lo que dejaste de lado regrese ahora a tu vida? La mayoría de ustedes renunciaron a la amistad y la intimidad ya sea consciente o inconscientemente. Se deshicieron de todos sus viejos amigos – y entonces no permitieron que ningún nuevo amigo entrara en su vida. Mira: el sí mismo espiritual tiene tanta disciplina interior y sin embargo tan poca mundanería. El sí mismo espiritual no siente el dolor de la soledad. No sabe por qué es tan importante tener amigos; reír juntos, compartir juntos experiencias. El sí mismo espiritual sólo ve el siguiente paso lógico, la siguiente apreciación lógica. Y no sabe por qué tú necesitas amigos para eso. Por qué necesitas belleza y seguridad y certidumbre. El sí mismo espiritual tiene un propósito en mente completamente diferente, una idea de la felicidad completamente diferente. Entonces yo, *Sofía*, te invito hoy a tener en cuenta si todavía es apropiado tener tu puerta cerrada para las amistades. Y no quiero decir las amistades superficiales que sólo mantienes en tu vida porque te sientes obligado, eso en su mayor parte sólo te agobia. Estoy hablando de las amistades de tu corazón – entre tú y otra persona a pesar de lo diferentes que ambos puedan ser, a pesar de lo diferentes que son los senderos que transitan. Estoy hablando de esta clase de amistad, esta clase de compasión, esta clase de diversión que sólo podemos experimentar aquí en la tierra. *** ¿Puedes permitirte experimentar esto de nuevo? ¿Puedes empezar a honrar tus necesidades humanas de nuevo que llevas dentro de ti y reconocerlas? Y ya no pensar que es una pérdida de tiempo realmente vivir. A ya no pensar que desear una hermosa casa simplemente es una pérdida de tiempo. A ya no creer que es innecesario porque también puedes trabajar en ti mismo y llegar a comprender más en una pequeña habitación. A ya no creer que cuidar de tu belleza física es una distracción puramente superficial. Pero sentir en cambio que tu sí mismo humano aspira a la belleza y a florecer tanto como tu sí mismo espiritual – sólo que en un nivel diferente. Tu sí mismo humano desea que tu cuerpo pueda empezar a reflejar tu belleza; que tu cuerpo pueda empezar a reflejar lo verdaderamente perfecto que eres. Y esta necesidad no es superficial. Esta necesidad no significa que todavía eres guiado por algún deseo inferior que te llevará de tu sendero. Esta necesidad es el anhelo de tu sí mismo humano de florecer, de ser más que nunca antes. Entonces puedes empezar a aceptar estas necesidades. A admitir la satisfacción de estas necesidades. Mira: has sido muy injusto contigo mismo durante los últimos varios años. Has diseminado tu atención de modo desigual. Le has dado a tu sí mismo espiritual interior mucho más de tu tiempo y atención. Le has asignado mucho más valor. Y el sí mismo humano siempre fue dejado de lado. Ya no es sólo las amistadas lo que dejas de lado. No es sólo la belleza física, el equilibrio físico y el sentido de bienestar dentro de tu cuerpo que dejas de lado. También hubo muchas más necesidades sencillas que pensaste que no eran lo suficientemente espiritual, que ignoraste. Y quizás esa sea la razón por la cual no te fue posible estar completamente contento con sólo tu sí mismo espiritual. La razón por la cual tu vida no se sentía del todo completa y satisfactoria. La razón por la cual siempre tenías la vaga sensación de que algo faltaba. *** Y no es tu culpa. No se trata de seguir adelante incluso más rápido, de avanzar incluso más. Sino en vez de ello es tiempo de volverte más lento, hacer una pausa y tener en cuenta si realmente quieres mantener por más tiempo a este aspecto esencial de ti mismo en segundo lugar. ¿O quieres empezar a ser un ser humano, un *ser humano espiritual*? ¿Quieres zambullirte incluso más profundo en esta vida, empezar a buscar todas tus necesidades, no únicamente algunas? A decir Sí a las cosas hermosas que tu sí mismo humano anhela. Tu sí mismo humano ya no siente ganas de sacrificar nada, no siente ganas de estar solo, no tiene ganas de callarse y suprimirse. Tu sí mismo humano quiere estar justo al frente y contribuir a tu vida tanto como tu sí mismo espiritual. Para aquellos de ustedes que les gustan las definiciones: quizás incluso podemos describir el sí mismo espiritual como siendo el principio más masculino y el sí mismo humano como siendo el principio más femenino. El sí mismo espiritual dentro de ti quiere seguir adelante constantemente, constantemente crecer; descubrir más de sí mismo, experimentar más de sí mismo. Y es el sí mismo humano es el que quiere participar completamente aquí en la tierra; el que necesita seguridad, certidumbre, quietud y placer para estar realmente feliz. El sí mismo humano anhela la belleza – la belleza interior y exterior. Y quizás puedas permitir que estos dos aspectos dentro de ti se reequilibren. No tienes que aumentar el desequilibrio tanto para que tu sí mismo humano se enferme debido a la aflicción, las dificultades, el sacrificio y la crueldad. Puedes empezar hoy a aceptar a tu sí mismo humano de nuevo: a hacerte amigo de tu sí mismo humano y a darte cuenta de que no quiere retenerte sino que simplemente quiere estar contigo. Simplemente quiere ver y compartir contigo como vives, como creces y como floreces. No quiere ser dejado de lado y tratado como un enemigo que debes derrotar. Simplemente quiere estar contigo, caminar contigo. Y el sí mismo humano – sí lo eliges – te ayudará a tener una vida más deleitable; una vida llena de todas las cosas humanas que dejaste de lado por tanto tiempo; más amistades, más amor, más conexiones, más placer, más belleza. El sí mismo humano es un maestro maravilloso que puede mostrarte como detenerte, como suavizarte, volverte más amoroso contigo mismo, como decirle Sí a un aspecto tan esencial de ti mismo. *** No se trata de estar por encima del mundo, hacerte a ti mismo suprimir un aspecto de ti mismo y condenarlo. Se trata realmente de decir que Sí a todo lo que eres. Mira: *la maestría significa decir que Sí*. Un Sí en todo respecto, en todos los niveles. Un Sí a ser humano. Un Sí a tu alma, a tu sí mismo espiritual. Un Sí a todo lo que eres. Un maestro no tiene que temerle al cuerpo y al sí mismo humano. Un maestro no tiene que temer que las alegrías de vivir le impidan crecer. Un maestro sabe: Todo está aquí para mí. Puedo aceptar todo, puedo explorar todo, puedo disfrutar de todo. Todas las puertas están abiertas para mí. ¿Estás listo para dar un salto por encima de la vieja brecha de separación y empezar una nueva amistad contigo mismo? Tú cambiarás como resultado. Algunos de ustedes han sido muy duros consigo mismos. Aquellos de ustedes que practicaron la espiritualidad como una disciplina estricta van a descubrir que su sí mismo humano los ayudará a llevarla más suave si la invitan a entrar. Ya no sentirán que tienen que atenerse a sus viejas reglas. Descubrirán que mucho más espacio será creado para el gozo; espacio para las alegrías pequeñas y grandes en la vida. Descubrirán que ya no quieren ser tan duro consigo mismos. Descubrirán que los juicios que tenían de ustedes mismos se disolverán. Y los juicios que tenían de otras personas también aminorarán. Quizás notes esto cuando hablas a la par de amigos que has juzgado en el pasado. De repente te darás cuenta de lo mucho que te gustan exactamente como son. Y que no es importante ser perfecto, tratar de alcanzar un cierto nivel de perfección. Ahora verás su belleza – su verdadera belleza -. Ahora serás capaz de también ver la verdadera belleza dentro de tu familia, tus colegas, tu propio cuerpo, tu propio hogar. Serás capaz de percibir estas cosas simples que percibiste de niño. Y notarás que no te volverás más lento en tu sendero – pero en realidad más rápido. Se requiere de mucho más tiempo cuando sólo un aspecto de ti tiene permiso para crecer y florecer en lugar de permitir que la totalidad de ti evolucione. Sólo entonces puede la vida llegar a ser más fácil y más satisfactoria, solamente entonces. Otra cosa importante que te encontrarás cuando aceptas a tu sí mismo humano de nuevo es *este profundo amor, este profundo orgullo de ti mismo*. El mismo orgullo que tenías en ti mismo de niño y de que te amabas exactamente como eras. Hoy puedes empezar a aceptarte de nuevo, a estar orgulloso de ti mismo, a apoyarte, apoyar todo lo que eres y todo lo que haces. Encontrar este profundo Sí para ti mismo de nuevo. Mira: también dejaste de lado este aspecto de ti mismo y te aislaste en el mundo espiritual porque una parte de ti te odiaba porque eres diferente, porque eres como eres. Una parte de ti estaba avergonzada; estaba avergonzada de la preguntas que hiciste, de lo diferente que sentías que eras. Una parte de ti estaba tan avergonzada que decidiste: No soy capaz de ser un ser humano normal y común que vive aquí en la tierra y que prospera. Únicamente me puedo asociar con otros seres humanos espirituales. Ellos son los únicos que son capaces de comprenderme. Sólo puedo llevarme bien y pasar tiempo con ellos. Entonces te distanciaste más y más de ti mismo. Y no notaste, no percibiste que hay un amor por ti como realmente eres; con todos los contrastes que existen dentro de ti, con el sí mismo humano y el sí mismo espiritual que son tan diferentes y sin embargo se complementan de manera tan maravillosa. No sentías en absoluto que hay un amor más grande por ti como realmente eres. Estabas tan atrapado en tu historia que las otras personas no eran capaces de comprenderte, que te juzgaban y se reían de ti, que no veías que *tú* ya no te comprendías a *ti mismo*, que *tú* te juzgabas y que *tú te reías* de ti mismo. No veías que la parte humana de ti a la larga se desprendió. Este aspecto de ti mismo pensó: Puesto que ya no soy bienvenido a estar cerca de ti, a respirar contigo, a crecer junto contigo, entonces más vale que me vaya. Tu sí mismo humano se sintió rechazado una y otra vez y entonces finalmente trago duro y se rindió. Y quizás es hora de ya no empequeñecer a tu sí mismo humano, de ya no reírte de tu sí mismo humano, de ya no controlar a tu sí mismo humano. De ya no rechazar y alejar a tu sí mismo humano. Quizás es hora de dejar que todo lo que eres esté aquí, incluyendo los contrastes; incluso si no tiene sentido y siente: hay un amor más profundo por ti. Tu alma tiene un nuevo amor, una nueva energía donde todo lo que eres puede crecer y florecer. Donde todo lo que eres pude vivir esta vida. Donde ningún aspecto de ti mismo tiene que dejarse de lado, ninguna necesidad tenga que ser suprimida o ignorada. Donde todo tiene su lugar. Donde todo lo que eres puede contribuir lo que tiene para ofrecer. *** Esta es la invitación que yo, *Sofía*, tengo hoy para ti. Es una forma nueva de espiritualidad que puedes explorar para ti mismo. A mí gusta llamarla *espiritualidad humana*. Sin la frialdad, la dureza y el juicio. Sin la autosuperación interminable, el juicio interminable, la supresión interminable de tus verdaderas necesidades. A mí me gusta llamarla *espiritualidad humana*. Mira: eso es lo que *Yeshua* (Jesús) se permitió cuando vivió – a sumergirse tan profundamente en la experiencia humana. Y notaste que le ayudó a ser aún más compasivo, a ser aún más comprensivo, a desarrollar aún más amor por él mismo. No era su objetivo situarse por encima de tales cosas y condenar la experiencia humana y hablar mal de ella. Era su objetivo vivir su vida y crecer. No temerle a ninguna parte de su vida. Entonces yo, *Sofía*, te invito a dar este paso más hacia esta nueva era de espiritualidad humana que parece ser muy simple y ordinaria. No tan elaborada y estricta como has conocido en el pasado; no tiene reglas, ninguna disciplina, ninguna dificultad, ningún sacrificio, ningún juicio. Sino que únicamente te invita a ser un ser humano. Mira: quizás, sólo quizás, no sea necesario hacer algo de esta vida que no es. Quizás no sea necesario crear una religión, crear una organización, una disciplina, añadir algo artificial a la vida. Quizás la vida misma es religión suficiente. Quizás cada respiro es suficientemente espiritual. Quizás cada experiencia humana que tengas te proporcione suficiente crecimiento. Quizás no sea necesario añadir nada artificial a la vida, añadir nada artificial a tu experiencia. Quizás la vida misma sea la invitación. Quizás sea suficiente vivir plenamente, completamente. Quizás sea suficiente ser tú mismo exactamente como eres, plenamente, completamente. Quizás no tengas que hacer "algo mejor" de ti mismo, un ser humano mejor, un alma mejor, un ser humano más disciplinado. Quizás sea suficiente ser tú mismo – verrugas y todo – con todos los altibajos de tus experiencias, con el sí mismo humano y el sí mismo espiritual y el amor de tu alma. Quizás eso sea suficiente. Quizás no se requiera de este enorme esfuerzo, esta lucha por la sobrevivencia por la que has luchado por tanto tiempo. Quizás no sea necesario que tú y otros se las pasen negras. Quizás no sea necesario trabajar en ti mismo. Quizás sea suficiente explorarte a ti mismo, llegar a conocerte, hacerte amigo de ti mismo. Quizás elegiste esta vida para dejar que toda insinceridad se funda, para soltar todas las estructuras que surgieron del temor. Para dejar de luchar contigo mismo, para soltar todas tus elevadas ambiciones, para estar aquí simplemente. Quizás esa sea la respuesta que estás encontrando ahora mismo dentro de ti mismo. Quizás sea suficiente así como una flor siente que es suficiente ser una flor. El ya no intentar encarnar nada más, el lograr cualquier cosa más. Y quizás también tu seas tal flor; suficiente, maravillosa, completa exactamente como eres. Esta nueva espiritualidad humana es una invitación para aquellos de ustedes que han luchado suficiente tiempo, han trabajado duro suficiente tiempo, se han juzgado duramente suficiente tiempo. Para aquellos de ustedes que están verdaderamente listos para vivir y disfrutar la belleza de la vida de ahora en adelante. Al principio parecerá que ya no son espirituales y que todo lo que los mantenía ocupados, por lo que lucharon, por lo que trabajaron y que querían aprender de repente no tiene importancia. Como si tu sabiduría valiera nada, como si las muchas creencias que tuviste acerca de ti mismo de repente fueran irrelevantes. Al principio parecerá que has perdido todo. Y yo, *Sofía*, quiero acompañarte en esta era de cambio y quiero mostrarte que hay una nueva sabiduría, una nueva serenidad, un nuevo amor creciendo dentro de ti. Es el mismo amor que Yeshua sintió por los seres humanos que conoció. El mismo respeto, la misma calidez, el mismo humor, la misma compasión y abertura que Yeshua sostenía. Yeshua no fue un maestro que se paraba en un pedestal sermoneando: Yo soy más grandioso que tú. Yo sé más que tú. Y tú eres tan débil que tendrás que trabajar toda tu vida para convertirte en lo que yo soy. Incluso entonces nunca tendrás éxito. No, Yeshua era simplemente este amor – este amor, esta nueva espiritualidad humana que se desarrolló totalmente dentro de él. Y él nos mostró: este es el camino. Esto es lo tú también experimentarás en el momento oportuno. Y yo, *Sofía*, entro aquí para recordarte: es el momento oportuno para dejar que esta espiritualidad humana florezca, para explorar lo que sucede cuando un ser humano está verdaderamente vivo. Y aunque los seres humanos hayan estado en este planeta por eones de tiempo, aunque hubo muchas civilizaciones, muchas culturas que vinieron y se fueron solamente hay un puñado de seres humanos que estuvieron verdaderamente vivos. Que estuvieron verdaderamente aquí, que verdaderamente se dijeron Sí a sí mismos. Que estaban llenos de sí mismos. Que sintieron tan profundamente que ellos eran perfectos exactamente como eran. Y eso es lo que la nueva era acarrea, lo que la nueva era te invita a hacer: a verdaderamente vivir como nunca antes. A dar un paso más cerca a ti mismo. Reconocerás a otros seres humanos que también transitan este sendero de espiritualidad humana. Y será más fácil para aquellos que han tenido solamente unas cuantas experiencias espirituales porque han mantenido mucho de su inocencia. Apenas han comenzado a manipularse; a cambiar tanto, a trabajar tanto. Es como dijo Yeshua: Sed como un niño pequeño. Permitid esta inocencia, esta ligereza, este humor dentro de ti mismo y mirad con asombro esta nueva era que apenas empieza. La espiritualidad humana apenas empieza a despertar en este planeta. Es realmente un tiempo especial. *** Y yo, *Sofía*, te invito a ser de lo más gentil contigo mismo, ser de lo más paciente contigo mismo. Grandes cosas están sucediendo profundo dentro de ti. Y es hora de apreciarte por todo lo que experimentas, de siempre ser tan amoroso contigo mismo como lo eres hoy. Yo, *Sofía*, transito este sendero en gozo junto con todos ustedes; comparto su experiencia, comparto sus preguntas, su curiosidad, su gozo, su temor, sus dudas y los invito: inhalemos este amoroso respiro juntos, este amoroso respiro que permite el inicio de la espiritualidad humana en esta tierra, que permite que la nueva era comience. Inhalemos este suave respiro juntos y observa como un suave resplandor se expande, se expande por toda esta tierra, por toda esta tierra. *Y así comenzamos juntos. *** Todas las cosas son como deberían ser. Todas las cosas están bien en el universo, por consiguiente, y a eso se debe que Yo Soy la que Yo Soy, Maribel <*> Para visitar tu grupo en la web, ve a: http://espanol.groups.yahoo.com/group/redcostarricensedeluz/ La Divinidad nos bendice siempre. La Divinidad es en nosotros/as Somos la Divinidad Somos Uno Byron Picado Molina SOCIEDAD BIOSÓFICA NICARAGUA (SBN) Helena Petrowna Blavastky "La Espiritualidad más expandida es el AMOR en VERDAD iluminado" Estelí,Nicaragua. América Central (Red Nicaragüense de luz) ( Red Estelí Cultural) |